| OTOÑO EN EL PICO ALMONGA 1.519 M. (AÑO 2012) MONTAÑA PALENTINA | 2012-11-13 |
Montaña Palentina
“Sensaciones en la cima”
11/11/2012
- Cervera de Pisuerga-Ruesga-Fuentes Carrionas.
- Un paseo circular de 4 horas a través de bosques y con ascenso al Pico Almonga que no crea grandes dificultades.
Seis montañeros: Manolo, Maripaz, Luismi, Marisa, Teo y Edu.
CLUB DE PESCA Y MONTAÑA RIVERA-PISUERGA-CERVERA DE PISUERGA-
Montaña Palentina
Partimos desde Cervera, llegamos al molino de Valdesgares, dejamos a la derecha las aguas claras del Rio Rivera. Un aire transparente de mañana fresca nos acompaña.
Caminamos por un terreno blanquecino del rocío. Sobre nosotros caen finos cristalitos de nieve que brillan con los rayos del sol.
Atravesamos robledales y pastizales, al fondo, envuelto en su majestuosidad, el Pico Almonga. Sorprende la belleza otoñal, es un espectáculo que cautiva. Una puesta a punto para los sentidos. Olores de monte. Colores dorados, amarillentos, rojizos, amarronados. Robles, hayas, acebos, avellanos. El declive de las hojas verdes da paso a los ocres de los viejos robles. Numerosos buitres planean muy bajos sobre nuestras cabezas e intentamos con nuestra cámara “cazar” alguno.
Hablando de caza, por todos los diablos, arriba un puesto, un cazador con escopeta en mano, “ojea” el paisaje. Los perros ladran y ladran, están a la espera del jabalí. No habíamos visto nada anunciado, ignorábamos la situación y ante “el enemigo, puente de plata”, reculamos y buscamos otra alternativa.
Pasamos por debajo del pico Cirigüeña, el hijo pequeño del Pico Almonga. Vamos tomando altura, un viento agresivo sopla con fuerza y hace que las hojas secas humedecidas revoleteen.
Hayas de amarillos intensos con pintas ocres nos sorprenden gratamente. A lo lejos unos ciervos saltan sobre las rocas.
Ascendemos por las “escaleras” de piedra alcanzando con facilidad la cima del Pico Almonga. Un escenario paisajístico espectacular. La hija de nuestro querido montañero Gelo nos hace la foto “oficial”, gracias.
Bajamos por la cara norte, un viento feroz, seco, hiriente y hace que los dedos de nuestras manos se paralicen, pero compensa la elección de la marcha.
Contemplamos un paisaje bucólico de armonía al completo. La luz del sol sobre las hayas y los robles hace que sus hojas brillen con tonos de más intensidad. Las praderas verdes. Las casas del pueblecito de Ruesga con sus chimeneas humeantes. Las aguas del pantano. El gran parador Fuentes Carrionas con el Peñalabra al fondo. Las nubes nos impiden ver la cordada de Fuentes Carrionas, apenas pudimos ver el Curavacas.
Contemplamos un paisaje bucólico de armonía al completo. La luz del sol sobre las hayas y los robles hace que sus hojas brillen con tonos de más intensidad. Las praderas verdes. Las casas del pueblecito de Ruesga con sus chimeneas humeantes. Las aguas del pantano. El gran parador Fuentes Carrionas con el Peñalabra al fondo. Las nubes nos impiden ver la cordada de Fuentes Carrionas, apenas pudimos ver el Curavacas.
Partimos desde Cervera por el molino de Valdesgares dejando a la derecha las aguas claras del Rio Rivera
al fondo, envuelto en su majestuosidad, el Pico Almonga.
El declive de las hojas verdes da paso a los ocres de los viejos robles.
Una puesta a punto para los sentidos.
Perdido en el bosque.
Cobijados bajo los amarillos ocres
Al fondo el bello pueblo de Ruesga
Compensa la elección.
Paisaje espectacular
Seguimos disfrutando-
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